Vueling

domingo, 1 de marzo de 2009

DIALOGOS

Con el presente título, pretendo crear en mi blog un diálogo entre todas aquellas personas que, habiendo entrado en mi blog, quieran dejar sus opiniones sobre el tema o temas que tratemos. Estas intervenciones irán dentro de una etiqueta denominada: "DIALOGOS" y para poder moderar las opiniones deberéis dejármelas escritas en mi correo. Las leeré y trasladaré a este foro para que puedan ser leídas por todos los seguidores del diálogo.
Entiendo que la introducción de cada participante, antes de entrar en discusiones sobre el pensamiento escrito de los demás, deberá ser una especie de CARTA DE PRESENTACION en la que cada cual deberá dejar claras sus hipótesis de partida sobre los temas a tratar.
Aclarado todo, dejo a continuación la CARTA de PRESENTACIÓN de mi buen amigo y promotor de la idea de estos diálogos, febade, o Simón Cabo, según queráis ser conocidos. Yo seguiré con mi nick de Incongruente, como bien me define.
CARTA DE PRESENTACION de febade
Intentaré resumir un poco mis pensamientos.

No creo en un Dios antropomórfico, más bien creo en una energía, en un principio donde todos los conceptos con los que se expresa el ser humano se aúnan en un todo, y donde estos mismos conceptos pierden su significado.

A este principio lo denomino "Coherencia". Una energía capaz de dar significado y forma a las cosas.
Ahora bien, muchas veces hemos oído hablar de que Dios es eterno, pues bien, no lo entiendo. La eternidad, para mi, es un estado donde el tiempo no existe, donde la voluntad no existe.....DONDE LA NADA EXISTE. El pensamiento discurre... la eternidad discurre... un lugar que no posee ni principio ni final, un lugar o estado así carece de tiempo, y sin tiempo nada es posible. Cualquier pensamiento que tengamos posee un principio y un final, la eternidad no, la eternidad ES. Por lo tanto la idea de la creación del universo tiene que proceder de un lugar infinito o, por lo menos, de un lugar donde el tiempo cohabita con la voluntad creadora.
El infinito no siempre ha sido así, debido a que el infinito ha tenido que tener un principio. La eternidad NO.

No se si me estoy explicando muy bien y disculpa si encuentras alguna incoherencia (espero que no)

Multitud de religiones sitúan el principio de la creación en la "voluntad" y de ahí parten hasta la materia, hasta lo real.

Alejandro, imagínate que el universo se repitiera, es un hecho que de ser así volveríamos a ser las mismas personas, los mismos acontecimientos, los mismos hechos ¿Por qué?..........

Ahora imagínate una máquina tragaperras de esas que hay en las cafeterías. Después de cientos de combinaciones llega un momento en que se forma una línea igual de imágenes. Lo mismo pasaría con nosotros. SI LA MATERIA NI SE CREA NI SE DESTRUYE LLEGARA UN MOMENTO DONDE TODO SE REPETIRA, DONDE TODAS LAS COMBINACIONES VOLVERAN A COINCIDIR Y A FORMAR DE NUEVO ESTE UNIVERSO QUE CONOCEMOS. Naturalmente el tiempo es relativo y para nosotros, para el ser humano, ese estado de coincidencia puede ocurrir dentro de trillones de años, pero ocurrirá.

Por lo tanto y para mí: Dios (llámese como se quiera) procede de un lugar donde está limitado por el tiempo, luego, sólo es omnipotente en su creación. Nosotros volveremos a él. A Dios lo envuelve la eternidad y esta marca sus límites.
Sé que muchos científicos alegarán en mi contra que: "en realidad existen universos, dimensiones, donde el tiempo no existe, la dimensión del tiempo NO EXISTE.
Es cierto, pero no me importa pues como teoría o hecho abstracto está bien, pero no me sirve para explicar la creación del mundo donde existo. Si hay otros mundos Dios no habita en ellos, o por lo menos no un Dios que dependa del tiempo para su creación.

¿Para qué existimos?

Quizá nos damos demasiada importancia a nosotros mismos. El ser humano posee un cáncer, y esta enfermedad no es otra que la conciencia. Ahora bien, el cerebro en sí mismo no es nada, es sólo en potencia. Nosotros somos lo que somos y sabemos lo que sabemos y evolucionamos; porque utilizamos la información de miles de años de evolución. Si pusiéramos a una persona desde su nacimiento hasta su muerte encerrado en una habitación, su cerebro sería comparable al de un animal. Por lo tanto lo único que sabemos a ciencia cierta es que nuestro cerebro es potencial. ¿Hasta dónde podemos llegar? esa es para mí la pregunta fundamental y en la que se basa la existencia humana. No es lo que hacemos, sino lo que podemos llegar a hacer.


Naturalmente ahí entran cientos de posibilidades, cada cual más fantástica, pero..., ¿posibles? Yo creo que sí.

No hay comentarios: